En este artículo trataremos de entrar en la cabeza del delincuente. Muchos psicólogos forenses con los estudios propuestos, han destacado algunos patrones que nos pueden ayudar a identificar conductas fuera de lo habitual en una persona.
Recordemos, que no solo el análisis del triángulo del fraude (presión, oportunidad y racionalización) que hemos visto en artículos pasados, nos da indicios de lo que puede estar pasando, sino que con esta nueva propuesta podamos entender, de manera general, qué es lo que la persona nos puede estar mostrando y que hasta ahora no hemos sido capaces de ver, ya sea porque nuestro día a día sea muy ocupado o porque hasta ahora no sabíamos este tipo de información.
Esta es una propuesta de varios años de experiencia, estudios de expertos criminales, psicólogos forenses y una combinación de mi experiencia profesional en el campo de la auditoría forense.
Encontramos entonces, las siguientes tipologías de comportamiento que nos pueden dar un indicio para poder identificarlos:
● Cambios fuertes en la forma como se describen
La American Psychiatric Association en sus libros DSM (Manual de diagnóstico de trastornos mentales), describe trastornos de personalidades extremas donde describen a los narcisistas como los planeadores del delito. Sin embargo, esta vez encontramos que no solo las personas que tienen una percepción de si mismos de manera exagerada, pueden ser candidatos a cometer actos irregulares sino también podemos encontrar el opuesto; en el caso de los narcisistas pueden ver como los más inteligentes y los dioses, se ven a si mismos arriba en la escala evolutiva llenos de vanidad y belleza. Por otro lado, encontramos sus opuestos, los cuales se ven a si mismos como inferiores, muy introvertidos y hasta poca cosa.
Aun sin una preparación especial en el campo forense, podemos identificar este tipo de personas que a veces saltan a simple vista.
● Hobbies extremos que suelen ser peligrosos
Podemos separar un poco los pasatiempos que a simple vista pueden ser peligrosos pero que no pasan de ser sencillos pasatiempos como la colección de armas de fuego, juegos de armas de fuego, caza o que le gusta la colección de armas blancas.
Sin embargo, si son personas extremistas que admiran a personajes extremistas, aprueban pensamientos y actuaciones radicales de forma abierta, este es un indicio que algo puede estar pasando aquí.
● Falta de empatía
Silvia Rodriguez Psicóloga y Coach describe la empatía como la capacidad de percibir, entender y compartir el estado de ánimo o los sentimientos de los demás con sus condicionantes particulares está muy relacionado con la tolerancia, flexibilidad y apertura de la mente, con respeto y permisividad hacia los demás, hacia sus acciones y pensamientos.
La falta de empatía la podemos encontrar en personas narcisistas, egocéntricas, con poco tacto al enviar mensajes a otra persona, con tendencias prejuiciosas que les gusta seguir estereotipos. Generalmente son personas que tienen relaciones superficiales y tóxicas.
Este tipo de personas utilizan a las demás para conseguir sus fines sin importar el costo, esto va muy asociado a los delincuentes que planean el delito, que llegan a utilizar a personas como sus escudos, personas que más tarde se convierten en bobos útiles para cometer el delito y llevar a cabo su propósito
● No se conectan
Son personas apáticas del mundo exterior, algo introvertidas que pasan su tiempo casi completo en la tecnología, con tendencia a la desocialización, posiblemente causada por bullying excesivo y humillaciones en su pasado. Personas algo dispersas en general y aparentemente distraídas todo el tiempo, hablando en el contexto extremista.
Recordemos que todos los excesos son malos y en este caso no es la excepción.
● Tendencias a la Depresión
Existe una relación estrecha entre las personas que cometen delitos y personas con trastornos mentales como la depresión. De acuerdo con infosalus, los investigadores analizaron 429 delitos cometidos por 143 delincuentes con tres de los principales trastornos mentales (depresión, esquizofrenia y trastorno bipolar).
De acuerdo a la Mental Health Of America, esta es una enfermedad grave y común que nos afecta física y mentalmente en nuestro modo de sentir y de pensar. La depresión nos puede provocar deseos de alejarnos de nuestra familia, amigos, trabajo, y escuela. Puede además causarnos ansiedad, pérdida del sueño, del apetito, y falta de interés o placer en realizar diferentes actividades.
Conclusión
Sea con intención o no, los delincuentes no descansan, mantienen siempre buscando la manera de cometer un delito en las organizaciones. De cada uno depende poder identificar estos indicios que nos lleven a identificar actos irregulares. Asimismo, es nuestra responsabilidad denunciar situaciones en que se pueda ver afectado el entorno en el que estamos.
Recuerde identificar los canales éticos en las organizaciones y no dejar que el miedo a denunciar controle su vida.
Bibliografía
Guía de consulta de los criterios diagnósticos del DSM-5
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